Despues de K.O Dahl he comenzado a leer a Mike Hammer, investigador privado clásico, mujeriego donde los haya, bravucón como el que más, impertinente sin mesura, vividor de pro. Todas las descripciones exhuberantes le calzan bien.
Han matado a su amigo del alma, quien dió su brazo por él y ha jurado venganza, se ha erigido como jurado, de ahí "Yo, el jurado".
Ya os contaré mi impresión.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario